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Poesía y Macarrones

MAURICE RIORDAN - UNA PALABRA DE LOS LOKI

UNA PALABRA DE LOS LOKI


La lengua Loki no se presta
a ser descrita en términos clásicos.
Fíjese en las vocales: sólo hay cuatro,
con una, articulada por inspiración
(es decir, tomando aire), que requiere
un milagro acrobático de la garganta
para encajarla con sus consonantes.
Un experto lingüista sólo consigue, con suerte,
una especie de aproximación, pero los Loki
la emiten con una precisión de bailarina.
Fíjese además en que la tribu ha producido
esta agotadora forma de articulación
para una palabra, un verbo intransitivo
empleado en sólo un modo, el optativo.

No hay equivalencias semánticas
en inglés, ni en todo el indoeuropeo.
A grandes rasgos, podemos traducir por bromear,
siempre que citemos otros usos,
como curarse de una picadura de serpiente,
comer pescado con los antepasados,
morir en casa en el poblado, sobrevivido
por todos los hijos y nietos de uno
.
Está prohibida en el habla diaria,
y los Loki, un pueblo comedido
que aborrece los castigos físicos
son severos en la observación de este tabú,
ya que los transgresores, de cualquier edad
o clase social, son entregados a mouri

(enviados, en realidad, a una muerte horrible,
dado que colocan a la víctima en una canoa,
le dan una calabaza de agua, un cuchillo
y uno de esos monos tan sosos
con cara de búho por compañía, los remolcan
hasta mar adentro y los sueltan en la corriente).
Pero el tabú se relaja en las así llamadas
fiestas de chistes: celebraciones espontáneas
que se forman tras partos múltiples
o una pesca excepcional de anjovas.
Es la ocasión para los cuentos
y la poesía, y tienen su parte útil
al permitir a los jóvenes aprender este verbo
y perfeccionar su sonido exacto.

Porque se cree que el verbo proviene
de los dioses ancestrales, su único don.
Y su uso oculto es específico: alejar
a los Loordhu, una horda caníbal,
de quienes se cree que merodean por el interior de la selva,
famosos por preferir la carne
fresca y cruda, criar niños in lieu de cerdos
y llamar delicatessen al ojo y la lengua.
La proximidad del peligro es anunciada
por un desaliento que parece sobrevenir
sin causa visible pero que produce
un rápido cambio en un pueblo de por sí
valiente y práctico, deteniendo
en cuestión de horas trabajo, juegos y charlas.

En estas crisis, los nativos se acercan
a la ribera del río y, al atardecer,
trepan a los árboles, donde recitan
este verbo en las horas oscuras.
Pero dado que, desde que la aldea tiene memoria,
los Loordhu no han atacado aún,
existen razones para no creer en la existencia
de una amenaza inminente para los Loki,
quienes, aún así, continúan, suspendidos, su cántico.
Éste, a la vez ansioso y fantasmal, produce
este notable resultado: apacigua
el alboroto de los gibones
y aquieta, hasta donde es audible, la extensa selva.

1 comentario

Hell -

Los Loki, como el dios tramposo y burlón de los escandinavos (además de otras tantas lindezas, el mal, la mentira, etc). Es curiosa la antítesis...