LOS SOÑADORES
Ayer vi Los soñadores, del amigo Bertolucci. Durante la primera media hora se me fue instalando la sonrisa de bobo, y a la altura de la carrerita por el Louvre, me di cuenta de que me caía una lágrima. En total tres lágrimas. ¿Por qué? Pues sabe dios por qué, mire usted, si supiera por qué también me sabría la definición definitiva de la palabra "cine". Por muchas cosas juntas, en proporciones heterogéneas, digo yo. Sobre todo porque, como dice don Julio, en algún momento nos equivocamos de vía, y seguimos por la falsa, ¡pero que no nos cuenten que esto es lo que hay, que estamos donde deberíamos! En fin, mayo del 68, nouvelle vague y Eva Green... ¿se le puede pedir algo más a una película?
3 comentarios
gregoriok -
Horacio en persona -
gregoriok -